jueves, 28 de enero de 2010

Nociones sobre la Hibrides








POR: MÓNICA VALLEJO.

NOCIONES ALREDEDOR DEL TEXTO CULTURAS HIBRIDAS DE NESTOR GARCÍA CANCLINI


“Entiendo por hibridación procesos socioculturales en los que estructuras o prácticas discretas que existían en forma separada, se combinan para generar nuevas estructuras, objetos y prácticas”


El concepto de hibrides remitido por García Canclini como una mezcla de conceptos, tradiciones, modos de vida, enunciaciones teóricas, en fin hacia toda una serie de procesos culturales, está muy vigente en esta época donde la modernidad aún no termina de pasar en medio de un mundo industrializado, de la mano de las revoluciones tecnológicas y económicas que tienen lugar en todas las sociedades desde las intermitencias de los medios de comunicación y el mercado que hace posible hablar desde las fronteras de una burocratización del conocimiento.

Inicio desde allí presentando la relación de este concepto que atraviesa simultáneamente las fronteras geográficas y las disciplinarias,
Lo asumiré como una especie de colonización de los imaginarios sociales de los juegos y rondas infantiles que en la época actual teatralizan los niños en su territorio o medio particular, donde la hibrides se presenta en los modos de enunciar, pues están sufriendo ya una transformación en ocasiones ligados a la dinámica social donde se quieren poner en práctica, o también al asumirlos como un conflicto al pretender buscar un reconocimiento del proceso de su transformación u origen histórico de tales juegos que se vuelven polisémicos, adaptables a otros lugares, tiempos y personas que hacen compleja la comprensión de los sujetos que intervinieron en su enunciación.

Se trata entonces desde mi tema de investigación de asumir el concepto de hibrides al entablar una búsqueda de las razones por las cuales los juegos y rondas infantiles modifican el modo de interpretar las nociones de identidad, de cultura, entendida como la producción de valores, conocimientos, estilos de vida; la transmisión y modificación de los mismos, la enunciación de discursos y generación de textos desde los marcos de la diferencia, desigualdad y multiculturalidad, utilizando algunas categorías que entrarían en conflicto : la tradición frente a la modernidad, los juegos de ayer y las transformaciones que estos tienen hoy, el saber local: como las propias historias narradas por los niños desde su espacio-tiempo definido y un saber global vigente en las narrativas mas mediáticas que tratan de conquistar unos sueños ya adultos para las mentes de los niños a quienes se les está negando la infancia al llevarlos a reproducir desde sus pensamientos los mundos plenos de cosas, de materialidad y de consumo, donde el imaginar ya no tiene lugar.

Desde estos horizontes parece querer resaltar Canclini que desde esta hibrides la cultura no puede permitirnos hablar ya de un saber o actividad propia, todo está mezclado, puesto que los juegos como una actividad cultural en lugar de afirmar formas de vida propias del niño, sueños particulares o representaciones de sus ficciones en lugar de incrementarse y enriquecerse se vacían, generando fisuras de identidad local, se hace un recipiente de control social, un receptáculo de los conflictos del adulto y un aniquilamiento de la fantasía del niño.

Esto se vería reflejado en la enunciación de las canciones donde los temas han variado adaptándose a las necesidades sociales del mercado, que incluyen ahora en la mayor parte de rondas el con
sumo de bienes, la distinción de género, la necesidad de pareja, las relaciones caóticas del amor, ideas que se expresan ya como parte del mercado de un imaginario social que muy bien se expresa en los medios y que sabe valerse muy bien de estrategias discursivas para fijarse en la mente de los infantes.

“Algo es seguro en todo caso: que el ensueño del niño es un ensueño materialista. El niño es un materialista nato. Sus primeros sueños son los sueños de sustancias orgánicas”. BACHELARD

En este caso de mi investigación particular Canclini postula que hay conceptos que cruzan las fronteras geográficas, que son de utilidad para analizar la identidad y discursos de otros espacio tiempos que deben hacer posible el acercamiento a las historias locales y sus signos específicos.

Estos planteamientos de la primera parte de su ponencia titulada la hibridación como recurso explicativo se sintetizan al sostener que su propósito consiste en :

“ …elaborar la noción de hibridación como un concepto social… encontré en este término mayor capacidad de abarcar diversas mezclas interculturales que con el mestizaje, limitado a las que ocurren entre razas, o sincretismo, fórmula referida casi siempre a fusiones religiosas o de movimientos simbólicos tradicionales. Pensé que necesitabamamos una palabra de significado más amplio para dar cuenta tanto de esas mezclas clásicas como de los entrelazamientos entre lo tradicional y lo moderno, entre lo culto, lo popular y lo masivo”


Este término da la posibilidad de hablar de los múltiples entrecruzamientos que se dan al interior de la comunidad que se investigará frente a los valores, modelos de vida que se construyen en los juegos y rondas infantiles entendidas como formas narrativas, como producciones estéticas y movimientos sociales que tienen lugar en la comunidad que poco a poco se aleja de una orientación tradicional para poner en evidencia los modelos de vida de la sociedad moderna.

Durante la construcción de los significados de este término sostiene que se encuentra una gran relación con cuatro conceptos: emancipación, expansión, renovación y democratización:

“ … pero la secularización de los campos culturales, la producción auto expresiva y autorregulada de las prácticas artísticas y políticas, la racionalización de la vida social y el individualismo creciente, todo eso que se ha considerado resorte de la emancipación moderna, convive en América latina con fundamentalismos religiosos y étnicos, con analfabetismo y arreglos arcaicos de poder. La expansión, así como la renovación social y cultural se han venido manifestando en el rápido desarrollo industrializador ,… en la fluida adaptación de ciertos sectores a las innovaciones tecnológicas y sociales, pero estos impulsos renovadores no sustituyen las tradiciones locales, a veces las acompañan y otras entran en conflicto con ellas, aunque sin destruirlas”

De aquí se deduce que se presentan diversos escenarios de las mezclas multiculturales, ya que esta expresión , Hibrides, se convierte en un concepto para poder manejar los entrecruzamientos espaciotemporales de las culturas sin caer en las valoraciones jerárquicas que resten u otorguen mayor significancia a las relaciones entre lo moderno-urbano, con lo tradicional rural, proclamando la búsqueda de pureza y autenticidad, términos que desde la hibrides serían cuestionados, puesto que la pureza no se presentaría ni en cuestiones de raza, ni de lenguaje, mucho menos en relación al conocimiento que como mencione anteriormente no hace sino unas construcciones que se enriquecen en el marco de los signos a través del lenguaje adoptando y adaptando términos y teorías que hagan posible poner en presencia de unos interpretes sus construcciones explicativas, objetivas de pequeños sectores de la realidad.


La utilidad del termino entonces se ajusta a mi investigación al interpretar la experiencia de los juegos y rondas infantiles como elementos constitutivos de una memoria colectiva que varía según los espacios sociales y geográficos, así trata Canclini de embarcarnos en el tránsito de la hibrides al interior de estas prácticas , el juego, asumido como un proceso cultural, que da muestras de transformación de los sujetos sociales y sus modelos de pensamiento, sus discursos y capacidad enunciativa en un entorno sujeto a amplias transformaciones que tiende cada vez más a un desarraigo de identidad, entendida como patrimonio cultural, como historia local, ante el auge invasivo de modas y estilos de vida foráneos, que rondan las mentes de los individuos , de los niños, bajo el imperio sugestivo de los medios de comunicación, del mismo discurso que ellos dominan con carácter de convencimiento que con potencia colonizan los imaginarios, vitalizando la posición de subalteridad de los sectores rurales, a través de diversas estrategias que permitan desvanecer la diferencia, implantar modelos de vida que guían a una supuesta felicidad, un mundo de idealización que comunica con la homogenización, para hacer de las particularidades regionales y locales un medio de explotación y beneficio de mercado, produciendo hibridaciones entre lo propio y lo ajeno, lo hegemónico y lo popular, lo local y lo nacional o lo transnacional.

“ Todas las artes se desarrollan en reilación con otras artes: las artesanías migran del campo a la ciudad; las películas, los videos y canciones que narran acontecimientos de un pueblo son intercambiados con otros . Así las culturas pierden la relación exclusiva con su territorio, pero ganan en comunicación y conocimiento ”

Canclini considera aquí el manejo de la temporalización como una dimensión vital de los procesos culturales, cuando afirma que el desarrollo moderno no suprime las tradiciones, es importante notar entonces que en las comunidades o en los países la continuidad en la producción cultural de los sectores populares se pueden acentuar de otro modo, por tener un contenido social distinto y también diversos soportes materiales, además desde lo cultural se deben considerar otras estrategias como sería el caso de las nociones de reproducción, transmisión y transformación de las prácticas culturales.

Canclini no busca resaltar la búsqueda de la autenticidad perdida, ni la reconversión, sino la presentación de continuidades transformativas que se apoyan en una memoria regional y/o popular, una memoria cuyas escenificaciones y símbolos son intransferibles. Se plantea así la problemática de la identidad y la multiculturalidad que emerge en los procesos de apropiación y participación social y cultural de diferentes miradas que constituyen los conocimientos, los saberes y los relatos de los actores sociales y culturales.

“… En este tiempo de globalización que vuelve más evidente la constitución híbrida de las identidades étnicas y nacionales, la interdependencia asimétrica, desigual pero insoslayable en medio de la cual deben defenderse los derechos de cada grupo”


Al analizar los juegos y las rondas infantiles que se van generando como un acto de creación, me interesa abordar el análisis de los discursos y elaborar un seguimiento de la colonización de los imaginarios de los niños que ha generado la sociedad globalizada, modificando sus modos de enunciar deseos y proyectos de vida, puesto que en ésta época las rondas tradicionales, las canciones de ”antaño” con las cuales se brindaba una serie de pautas de corte ético para la formación de los niños, poco a poco se han ido distorsionando, dando lugar a ideas marcadas de materialismo, todas estas actividades inciden en la modificación de los imaginarios sociales de estos niños que viven un mundo aparte, un mundo de la diferencia que se hace visible cuando a través de la palabra, a través de la interacción social denuncian o expresan su inconformidad, o su deseo de acomodarse a los valores de una sociedad que los invita a jugar en el marco de las identidades modernizadas donde para subsistir debes formar parte del mercado, del consumo.

A través de estos elementos interesa en el análisis de esas narraciones el sentido del tiempo, un tiempo que tiene materialidad lingüística para hablar del pasado, el presente y el futuro desde las voces de la tradición movilizadas en la discursividad de los juegos y rondas infantiles, desde la cultura oral, donde las palabras tienen presencia visual, los objetos que representan son reales elementos de deseo, es decir, las palabras "llaman" a la memoria, evocan esos objetos de deseo para verlos. Puesto que como sostiene Walter ong en los juegos y rondas infantiles las palabras no tienen foco ni huella, ni siquiera una trayectoria. Las palabras son acontecimientos, hechos.

domingo, 17 de enero de 2010

LITERATURA INDIGENA EN COLOMBIA

LITERATURA INDIGENA EN COLOMBIA



La literatura como una práctica social expone, indaga y cuestiona tradiciones, características histórico-culturales, ideologías, políticas, en sí moviliza una serie de imaginarios. Parte de ella es la poesía indígena, que expresando emociones de variada índole, entre sus contenidos refleja las vivencias de un autor y su posicionamiento en medio de su comunidad y sociedad global, asumiéndola como sendero de comunicación entre el entramado de lectores y autores en medio de un círculo de interpretaciones que le dan movilidad y vigencia.



La práctica literaria de indígenas que está surgiendo en nuestro país, instaura una necesaria actividad dialógica para revisar, cuestionar o reflexionar el posicionamiento que este tipo de autores están logrando, pero fundamentalmente buscar un acercamiento a sus textos, a los discursos que en ellos se movilizan y los elementos etnoliterarios que entre esas letras circulan.



Ahora vemos como en el plano cultural se da lugar a un conjunto de expresiones del pensar indígena que desbordan la modalidad de la oralidad, para entrar en la literacidad y resaltar la visión del otro, involucrándose con actividades que aseguren la prevalencia de su pensamiento tradicional, tal es el caso de la escritura como actividad artística y literaria que se cultiva ya en nuestro país por indígenas, que procuran forjar otros sentidos para mantener su tradición, dando lugar a esta forma de enunciación que involucra la historia de sus comunidades, vivencias particulares, y con ellas la apropiación de códigos que legitimen su decir en la literacidad.



La literatura indígena, en especial la lírica, está operando significativamente en la construcción de los imaginarios sociales. Ahora ya se puede hablar de cierta presentación de una literatura alternativa escrita por indígenas como otra ventana que posibilite la comprensión de su entorno cultural, que a pesar de estarse permeando por el auge de patrones transculturales, aún mantiene vigente su pensamiento ancestral que se deposita a través de discursos que en el marco de occidente se conocen como poesía, forma expresiva donde el lenguaje adquiere mayor significación y funcionalidad para las etnias, que ven en la palabra escrita un sucedáneo de su memoria que posibilitará el mantenimiento de elementos identitarios y por consecuencia la vitalidad de los imaginarios propios de su cosmovisión india.



Por todo lo anterior surge este estudio, para plantear una reflexión en torno a esta forma de pensamiento que están activando los indígenas que incursionan en la poesía, quienes desde su función de líderes en sus comunidades se han introducido en el ámbito de la cultura letrada.



Este trabajo por tanto busca ser una vía para la comprensión de esa literatura alternativa, centrándose en el estudio de algunos textos de la producción poética de: Freddy Chicanganá y Miguel Ángel López, pertenecientes a la comunidad yanacona y wayuu, quienes han participado en varios eventos culturales que se centralizan en el pensamiento indígena.



La investigación desarrollada se perfila entonces desde la construcción de un ensayo dividido en cinco capítulos, en los cuales se busca generar una aproximarnos a los elementos etnoliterarios presentes en sus textos, junto con un campo crítico de reflexión que permita enmarcar su producción dentro de un horizonte de representatividad en lo entendido como literatura.



En relación a lo anterior, este escrito en su primera parte presenta las nociones generales de lo entendido por literatura indígena y dentro de ella, la poesía como una de sus manifestaciones, seguida en el segundo capítulo, de una visión panorámica de la trayectoria literaria de los dos autores, tema que permite concertar algunos aspectos fundamentales del proceso escritural de los poetas. En el tercer capítulo se hace alusión a los imaginarios culturales y la relación de estos con la creación literaria, para enmarcar desde una metodología semiológica los aspectos etnoliterarios movilizados en algunos textos, que forman parte de la producción poética de los autores citados, mediante una selección de textos que hicieran posible la definición de una propuesta de análisis para estas obras.

El capítulo cuatro expone la discusión sobre el canon y la poesía indígena, desde la caracterización estética de sus obras mediante un paralelo comparativo por analogía que haga posible encontrar los puntos de encuentro entre las producciones de los dos autores referidos en este estudio.

Para finalizar, en el quinto aparte, se realiza una reflexión general sobre el porvenir de la literatura indígena en Colombia, desde una presentación de otros escritores que están tomando espacio en medio de los círculos literarios que aún permanecen cerrados a la comprensión de esta producción artística.



En vista a lo anterior nuestro trabajo orientado hacia un acercamiento etnoliterario, no pretende insertarse en análisis estilísticos, ni tampoco demostrar las influencias o las escuelas o las corrientes literarias que bañan a su poesía, no. Preferimos dejarlo a los lectores, allí están las piezas para construir otros textos. En estas letras no buscamos encasillar cada poética a lo establecido según las normas elaboradas por las comunidades que se encargan de delimitar lo literario; sino que realizamos una visión detenida en los enunciados que nos permitan encontrar los imaginarios de sus temas que abran vías y sentidos de interpretación.



Ganaremos al haber construido estas líneas, si se logra comunicar de cada voz de autor, la intertextualidad de sus poemas, que por algún lado emiten y sienten las luchas, las tragedias históricas, los cambios sociales propios de su contexto, que aunque es contemporáneo, aún presenta elementos de tradición.



Esperamos que la investigación haga un aporte al ámbito de la Etnoliteratura, campo que está destinado al reconocimiento de la actividad literaria surgida en la sociedad y en cada uno de sus grupos humanos, entre ellos las voces de los indígenas. Lo que hace necesario la comprensión de las distintas facetas étnicas, idiosincráticas, cognoscitivas, culturales que recoge esta naciente manifestación literaria que retoma y proyecta el encuentro con las potencialidades creativo-poéticas de estos nuevos escritores indígenas.





Los conquistadores invadieron

los territorios de los príncipes indios

y los despojaron del oro, cuentan las crónicas,

pero les dejaron la poesía. Menos mal que la Independencia

puso de patitas en el mar

a los españoles, pero dejaron a los criollos la

herencia de seguir

despojando a los po¬bres indios,

ahora de la

tierra pero no de la poesía. Porque

algo hay que

dejarles, para

que por lo

menos se quejen

sin apelar al garrote. El que tiene la poesía

para protestar no tiene porqué valerse de

otros recursos para reclamar sus derechos.

Jotamario Arbeláez.



http://www.youtube.com/watch?v=jgfVvO8XNWk





(leer mas: Tesis de grado Maestria Etnoliteratura, Universidad de Nariño. Por: Mónica Vallejo)